La villa ubicada en Hűvösvölgyi út 81 en Buda no solo es un valor arquitectónico, sino también un símbolo cultural. Encaja con la Libros ciudadanos de Buda II. Serie, como el Jardín Dohnányi, el Complejo de Edificios de la Tierra Santa Húngara o la Capilla de la Virgen María de Ferenchalm. El edificio, rodeado de un jardín de árboles centenarios y un estanque con peces, emana una atmósfera excepcional.
La historia de la villa está estrechamente ligada a la memoria del escritor Antal Szerb. Con motivo del 75.º aniversario de su muerte, se colocaron una placa conmemorativa y una piedra de tropiezo frente al edificio. Actualmente, la Fundación Munka-Kör para Personas con Discapacidad Auditiva opera en la propiedad, mientras que sus plantas superiores se utilizan como residencia.
La complejidad del edificio y su aura intelectual son obra de arte total Puede describirse como una entidad artística que complementa la arquitectura, el paisajismo, la historia y la responsabilidad social. En los últimos años, la villa también ha atraído la atención de instituciones como la Presidencia de la República, que ha expresado su reconocimiento por la responsabilidad social de la fundación que opera en ella.
El enfoque de Antal Szerb hacia la literatura y el concepto de cultura determinaron fundamentalmente la vida intelectual húngara. Historia literaria húngara En su obra escribe:
"El espíritu húngaro es un producto inherentemente civilizador, creado por pasiones contenidas y una conciencia triunfante".
Su obra de historia cultural planteó exigencias literarias, sociológicas, psicológicas y etnográficas a la vez. El pensamiento sintetizador de Antal Szerb le permitió crear uno de los resúmenes más completos y legibles de la historia literaria húngara.
Su monografía explora sus conexiones personales, amores y reflexiones filosóficas, con especial atención a la relación entre los sentimientos humanos y la cultura. Adoptó un enfoque crítico incluso en temas delicados como la filosofía del amor, abriendo nuevos horizontes a las interpretaciones culturales.
El uso actual de la villa se inscribe en el espíritu de creación de valor comunitario. La Fundación Munka-Kör para Personas con Discapacidad Auditiva trabaja por la igualdad de oportunidades no solo para las personas con discapacidad auditiva, sino también para las personas con discapacidad en general. Las actividades de la Fundación también fueron elogiadas por la Dirección de Relaciones Sociales de la Presidencia de la República en 2013, y en 2019 estuvo representada en un foro profesional internacional de HORECA, cuyo objetivo era desarrollar programas de formación profesional para personas con discapacidad.
En 2018, la Fundación participó activamente en En la Sexta Conferencia sobre Ciencias de la Discapacidad , que tuvo lugar bajo el lema "La diversidad como valor social". El evento contó con el apoyo de la Academia Húngara de Ciencias, con motivo del Día de la Ciencia.
El jardín de la villa fue galardonado como "El Jardín Más Hermoso del Distrito II" en 2021, como parte del programa "Buda, nuestro Hogar", organizado por la Alcaldía. El ambiente especial del jardín se complementa con el estanque de peces ornamentales, la vegetación arbórea centenaria y el parque, cuidadosamente cuidado. La importancia cultural de la villa se ve reforzada por el apoyo del director de dibujos animados, artista gráfico e historiador cultural Marcell Jankovics. Jankovics también dejó constancia de su contribución por escrito al permitir que la Fundación Munka-Kör distribuyera los dibujos animados que dirigió, marcó y subtituló para el público con discapacidad auditiva.